0 vistas
|
0 likes
El profesor está obsesionado con su alumna, la morena que siempre se sienta en la parte trasera del aula. Después de una clase en la que ya no podía aguantar más, la deja castigada con una excusa absurda y le echa el polvo de su vida, empezando por comerle el coño, tan sabroso y jugoso como se imaginaba. Por fin ha cumplido su fantasía…